miércoles, 3 de noviembre de 2010

¡Ideas, cámaras, acción!

El activista y autor británico, John Blundell, recibirá en el país un doctorado honoris causa.

Carroll Ríos de Rodríguez

El desánimo nos puede hacer creer que los guatemaltecos nunca transitaremos hacia un orden social apto para personas libres y responsables. Podemos olvidar que las ideas tienen consecuencias, y podríamos dejar de pregonar el ideario de la libertad con convicción y brillo. Por fortuna, estará en Guatemala esta semana un creíble portador del mensaje, el activista y autor británico John Blundell. Junto con Michael Walker recibirá un doctorado honoris causa de la Universidad Francisco Marroquín el sábado, 6 de noviembre.

El Dr. Blundell se ha dedicado en cuerpo y alma al fortalecimiento de los llamados tanques de pensamiento que defienden la libertad: el prestigioso Instituto de Asuntos Económicos (IEA) en Gran Bretaña, y varios otros en Estados Unidos, país donde vivió once años. Ha pensado detenidamente sobre la mejor forma de transmitir ideas.

John Blundell adopta una visión hayekiana del cambio, al distinguir entre los creadores de las ideas y los transmisores de las mismas. Admite, primero, que labatalla de ideas perdurará siempre. Los grupos que trabajan con ideas no pueden descansar ni permitirse actitudes triunfalistas. No deben descuidar la producción de ideas originales, ni la forma en que éstas se transmiten.

Blundell se refiere al intermediario o transmisor de ideas como el “guardián de la verja”. Es tan importante como el creativo, pues él es quien decide qué ideas y opiniones llegan a nosotros, qué hechos son importantes de comunicar al público y bajo qué perspectiva deben abordarse. El guardián de la verja puede ser un comunicador, reportero, novelista, artista o caricaturista, actor de cine y más. Un promotor de ideas debe tomarse el tiempo de persuadir a los guardianes de la verja y de formar a futuros intermediarios.

Acota Blundell que el público en general, los guardianes y los pensadores originales solemos caer en un error con graves consecuencias. A veces, requerimos de los expertos opiniones sobre temas alejados de su área de competencia. Estas personas son igual que todos los demás mortales cuando se les consulta sobre cuestiones que no han analizado con detenimiento: todos somos relativamente ignorantes de una gran variedad de tópicos. ¿Por qué pedir opiniones económicas a Andy Warhol, o sabiduría pictórica a Milton Friedman? A su vez, un experto debe ser lo suficientemente humilde para reconocer cuándo hablar y cuándo callar.

Margaret Thatcher es la protagonista de un exitoso libro escrito por Blundell (2008), y valida sus cavilaciones sobre la transmisión de ideas. Ella afirma que el centro de investigación IEA influyó en la opinión pública, al punto de allanar el camino para las reformas liberales que implementó tras asumir el poder en 1979.

Los retos para la Guatemala del Siglo XXI son distintos a los de Inglaterra en los años 80, pero podemos aprender sobre el proceso de generación y transmisión de las ideas. Necesitamos inspirar a muchos más guatemaltecos con la ilusión de convivir en paz, en un entorno de promesa y prosperidad.

Articulo publicado en el diaro guatemalteco "Siglo XXI" el dia miércoles 3 de noviembre de 2010




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