viernes, 30 de diciembre de 2011

Acuerdos o “Recuerdos” de Paz


Estuardo Zapeta

Extraños los caminos de la política, ya que precisamente es un militar, firmante de los “acuerdos” quien regresa al poder.

Él se autodenominó El General de la Paz, pero yo creo que en realidad es El General de los Acuerdos de Paz. Ser de la paz y ser de los acuerdos, significa un mundo de diferencia para el presidente electo, Otto Pérez Molina, quien en un par de semanas pasará de ser signatario de los “acuerdos” a ¿”cumplidor”? de los mismos.

Extraños los caminos de la política, ya que precisamente es un militar, firmante de los “acuerdos” quien regresa al poder.

La “quinceañera desvirgada”, como he apodado a la celebración de 15 años de “los acuerdos”, parece que salió “anoréxica, bulímica, con personalidad múltiple, bipolar, suicida, multipolar, drogadicta, alcohólica, psicótica, esquizofrénica, y más peperecha que la diplomacia europea y gringa juntas”, y aún así le hacen fiesta de quinceaños en lugar de mandarla a recuperación inmediata a un centro psiquiátrico.

Pero más importantes son los hechos señalados ayer en conferencia de Prensa por la Red Nacional de Organizaciones de Jóvenes Mayas, RENO´J, acerca de las causas que provocaron la guerra interna, y la exacerbación de dichos problemas. (La quinceañera, pensé yo, se va a morir.)

“Hay muy poco que celebrar”, decían, cuando la pobreza, el analfabetismo y discriminación son todavía pan diario. Cierto: las causas de la guerra interna no sólo no han desaparecido ni disminuido, sino que han crecido, y con ello la posibilidad de una ingobernabilidad creciente.

Ese es tu escenario, Otto. Por eso distingo entre ser de la paz, y ser de los acuerdos, y las malas noticias son que de “los acuerdos” no hemos pasado, y, de hecho, los “acuerdos” se quedaron cutos porque el patojo creció y el pantalón de la paz ya no le queda.

Yo no me iré a las altilocuentes y rebuscadas palabras que los discursantes utilizan en esas presentaciones públicas; esas palabras como “estructural, coyuntural, imaginario social, problemática, etc.”, léxico que sólo los doctos en reestructuración sociocultural utilizan, y cuya fluidez idiomática podría ser hasta estudio de seres más humildes como Chomsky, Foucault, Sapir, Whorf, Bordeau, Eco, etc. No, yo no llego a esas alturas de la alta escuela.

Prefiero ponértela así: “la cosa está fregada, y vos Otto decís que sos el yeneral 2.0 de la paz, y yo te digo que sólo sos de acuerdos, nada más, pero por estar luciendo con la firma de los acuerdos, ahora te fregaste porque aparte de presidente tenés que implementarlos, te guste o no” (más fácil hablar como habla la gente).

Entonces, me quedan varias preguntas: 1. ¿Van a evaluar a las Comisiones Paritarias y a las Especiales? 2. ¿Habrá en el gobierno Patriota otro Referéndum? 3. ¿Van a desarrollar el Artículo 70 de la Constitución? 4. ¿Creceremos en economía al 6% anual sostenido por 10 años como dice el Acuerdo Socioeconómico?. 5. ¿Subirá el presupuesto del Ejército, como lo establecen los acuerdos? 6. ¿Tendremos un Ministro de la Defensa civil (pachuco)?. 7. ¿O mejor Fundamos la República?

Vaya tareíta la que tiene Otto, El General de los Acuerdos. Lejos está la paz.

Artículo publicado en el diario guatemalteco "Siglo 21", el día viernes 30 de diciembre 2011.

No hay comentarios:

Publicar un comentario