miércoles, 14 de julio de 2010

Las Termópilas de Colom


“Es legítima la resistencia del pueblo para la protección y defensa de los derechos y garantías consignados en la Constitución”.

Marta Yolanda Díaz-Durán

Después de 12 días en los cuales fui casi ajena al debate político nacional, regreso a mi país con las armas intelectuales cargadas de ideas renovadas y muchos nuevos argumentos para pelear la batalla política que le tocó a mi generación.

Tengo claro que la lucha no es sólo en contra de los abusos del gobierno de Álvaro Colom, sino en contra del sistema de incentivos perversos, el Estado Benefactor/Mercantilista, que fue adoptado hace 65 años. Un conjunto de normas que, a pesar de sus pretendidas intenciones de ayudar a los pobres, lo único que ha logrado es atraer y llevar a los peores elementos de la sociedad al ejercicio del poder. Gente cuyo paso por la administración pública les permitió, y les permite, enriquecerse a costa de las personas trabajadoras y productivas.

El gobierno ha fallado por lo menos en el cumplimiento de sus funciones primordiales ordenadas en la Constitución Política de la República en los artículos 1, 2, 3, 4, 5 y 39.

Álvaro Colom, en sus más recientes declaraciones, en tono de amenaza, de nuevo viola los artículos 5 y 35 de la Constitución que tratan sobre la Libertad de acción y la Libertad de expresión. El artículo 5 dice: “Toda persona tiene derecho a hacer lo que la ley no prohíbe; no está obligada a acatar órdenes que no estén basadas en ley y emitidas conforme a ella.
Tampoco podrá ser perseguida ni molestada por sus opiniones o por actos que no impliquen infracción a la misma”.

A pesar del disgusto que pueda provocar al Presidente y al Vicepresidente, Rafael Espada (por quien me encuentro demandada), escribo en pleno uso de mi derecho constitucional contenido en el artículo 35 que reza: “Es libre la emisión del pensamiento por cualesquiera medios de difusión, sin censura ni licencia previa. Este derecho constitucional no podrá ser restringido por ley o disposición gubernamental alguna... No constituyen delito o falta las publicaciones que contengan denuncias, críticas o imputaciones contra funcionarios o empleados públicos por actos efectuados en el ejercicio de sus cargos”.

Creo que los ciudadanos respetuosos, productivos y responsables, la mayoría, debemos invocar el artículo 45 de nuestra Constitución (Acción contra infractores y legitimidad de resistencia) para defendernos de los abusos de nuestros gobernantes: “Es legítima la resistencia del pueblo para la protección y defensa de los derechos y garantías consignados en la Constitución”.

Creo que la batalla se puede ganar sin violentar las normas vigentes y de manera pacífica. Bastaron 300 hombres, peleando por su libertad y la de sus seres queridos, para vencer al poderoso ejército de Persia hace más de 2,500 años, en la célebre batalla de las Termópilas.
Hoy, más de 73 mil ciudadanos guatemaltecos solicitamos al Congreso una consulta popular, según manda la Constitución, por medio de la cual esperamos cambiar la situación lamentable y en constante deterioro en la cual vivimos. ¡A la carga compatriotas!
Artículo publicado en el dirio guatemalteco "Siglo XXI", el día lunes 12 de julio 2010.

¿“Imperialismo” de lo económico?


En las épocas se ha manifestado entre los pensadores cierta preferencia por alguna metodología especializada del saber.

Armando de la Torre

Gerald Radnitsky unos años atrás hizo público su asombro, con un título parecido al que encabeza este breve comentario, ante la enorme importancia metodológica que ha adquirido la disciplina económica en los análisis académicos de las demás ciencias sociales.

En todas las épocas se ha manifestado entre los pensadores cierta preferencia por alguna metodología especializada del saber. Los griegos, por ejemplo, de Sócrates y Platón en adelante, tendieron a considerarlo todo desde su subordinación al ángulo para ellos prioritario de la ética. Los modernos, en cambio, a partir de los logros de Galileo y Newton, hubimos de tender por centurias a privilegiar sobre los de las demás ciencias muy particular el enfoque de la Física mecánica. Hoy, en cambio, se antepone la metodología desarrollada para el estudio de los fenómenos derivados de la escasez de recursos y de sus usos alternativos (la economía) a cualquier otra.

Adam Smith abrió el camino. Desde entonces, más allá de lo que desde ese mismo ángulo han incorporado sociólogos, historiadores y psicólogos a sus respectivas disciplinas, se adentran también las especializaciones en las ciencias naturales (la tesis de Radnitsky). Y así tropezamos a cada paso con que químicos, biólogos, y aun astrofísicos, se atreven a sondear las más complejas interacciones de materia y energía hasta en los espacios siderales desde perspectivas de escasez y eficiencia.

Al Derecho, y a la consiguiente impartición de la justicia, le ha llegado su turno.

Siempre se ha sabido de la estrecha relación entre las realidades “económicas” y las normas jurídicas por las que se rigen desde los tiempos de Hammurabi. Su área más representativa podría identificarse como derecho mercantil, pero también se podría incluir en ella otros muchos tópicos del derecho civil, y aun del derecho penal, sobre todo desde cuando la moneda empezó a penetrar las instituciones jurídicas romanas hacia el siglo III antes de Cristo. El régimen de las obligaciones, la propiedad, los contratos, la herencia, responde a una estrecha correlación entre lo económico y lo jurídico.

Pero lo de hoy, lo que se ha dado en llamar análisis económico del derecho, es del todo nuevo. A su raíz se pretende una fusión revolucionaria de enfoques contrapuestos.

La rama del derecho (Ius) en el Occidente, desde los supuestos del derecho consuetudinario romano, pareció contrastar con la de la economía tal cual se la ha entendido desde Adam Smith y David Ricardo. Se las veía como ramas mutuamente autónomas del conocimiento, práctico en el uno, teórico en la otra. La primera se remitía a los hechos sólo ex post facto (los datos “positivos” según August Comte). La segunda empero, la economía, los pondera “ex ante”, en el intento de anticiparlos.

El movimiento contemporáneo de análisis económico del derecho ensaya conjugar ambas visiones, con el propósito de coadyuvar a la mayor creación de riqueza posible o, a la inversa, a la mayor reducción de sus costos. Se entiende, claro está, que a mayor eficiencia productiva, mayor justicia.

Tal propuesta ha provocado entre nosotros un interesante debate. Ante tal criterio en apariencia “economicista”, Humberto Grazioso, brillante profesor emérito de Filosofía del Derecho en la Universidad Francisco Marroquín y “iusnaturalista” de pura cepa, objeta que el bien de la justicia es por naturaleza anterior y superior a cualquier consideración exclusiva de eficiencia económica al producir y, por lo tanto, que permanece enteramente irreducible a la misma.

Otras eminencias guatemaltecas, Edwin Melini, Eduardo Mayora, hijo, José Luis González Dubón, Alejandro Baldizón et alii, y el juez y autor argentino, Ricardo Rojas, que nos honra con su visita por estos meses, parecen inclinarse a lo contrario.

En el debate, los identificados con la mayoritaria corriente jurídica positivista brillan por su ausencia...

(Continuará)

Artículo publicado en el diario guatemalteco "Siglo XXI", el día domingo 11 de julio 2010.

viernes, 9 de julio de 2010

El Presidente crispado

A Colom ha dejado de interesarle proteger la libertad de expresión de las arremetidas gubernamentales.

Karen Cancinos

Ahora que todos hablan de Alfonso Portillo otra vez, recuerdo cuando hace casi siete años las calles de la ciudad se llenaron de aristidescrespos, zurys y haroldosquejs, todos ellos bien armados de palos y debidamente cubiertas las caras, aunque a un diputadito no le dio el coco ni para eso, y su desagradable pinta de terrorista tropical salió en televisión nacional hablando por celular.

Luego de ese triste episodio que costó la vida a un periodista, el mito de “El General” se esfumó. Asumió entonces la presidencia un hombre bonachón, Óscar Berger. Ahora sí, nos felicitamos los guatemaltecos, logramos deshacernos del esperpento autoritario de Ríos Montt y su estela de oportunistas corruptos. Pero ¡ay!, el mandatario que hablaba como abuelito tenía muy pocas luces, y al finalizar sus cuatro años de gestión, con esa incorregible visión romántica que tenemos de la política, decidimos que nos iría mejor sentando en la poltrona presidencial a otro hombre bueno, pero más listo.

Fue así como un señor de cara tristona, asténico como don Quijote y en apariencia tan idealista como él, se convirtió en Presidente, tras una década de estar pidiéndolo. Pero hoy, transcurrida más de la mitad de su mandato, hemos comprobado, más de una vez, que de inteligencia serena y personalidad conciliadora, nada. Álvaro Colom ha sacado el cobre: lo que mostraba ayer Siglo Veintiuno era el rostro furioso y desencajado del hombre a quien corresponde el deshonor de iniciar en nuestro país una depauperación social que podría ser irreversible, caso de darse la continuidad del oficialismo actual.

Es comprensible que la libertad de expresión sea para los políticos, de aquí y de todas partes, lo que manojo de ajos para las huestes de Drácula. Intentar controlar todos los goznes de una sociedad es una tentación a la que no se escapa ninguno de ellos, y no por ruindad: tal es la condición humana cuando se tiene poder, más cuando éste es mucho. Por eso a los políticos inteligentes y honestos —que los hay, incluso en Guatemala— les importa cuidarse de intentar someter la libertad de expresión al criterio del poder de turno, sectario por definición.

Pero a Colom ha dejado de interesarle. ¿Por qué habría de molestarse en mantener una imagen de prudencia y moderación, cuando ya consiguió su objetivo? Desfallecía porque le dijeran “Presidente”, lo logró y ahora, pues nada, a disfrutar de las mieles mientras se pueda, que con año y medio por delante es poco lo que le queda. Sin embargo, no es inteligente seguir con esa pose peleona que últimamente se ha echado, puesto que no le hace ningún favor al continuismo de su partido. Según dicen, su mujer quiere sucederle. Cristina lo hizo, yo también quiero, ha de jalonear al pobre, como si éste no tuviera ya suficiente con el avispero de “asesores” que lo “defienden” de los dardos que lanzamos “los malos” que criticamos la gestión gubernamental. No me ayuden compadres debería ordenarles, tal vez así alcanzaría un poco de paz y de paso —qué paradoja— ayudaría a las pretensiones de su cónyuge.

Porque de mantener la tónica de gallito de pelea frente a la prensa, lo único que conseguirá será que se cierren filas ante lo que se percibe, con razón, como una arremetida de su gobierno a los jirones de institucionalidad que aún quedan.
Artículo publicado en el diario guatemalateco "Siglo XXI", el día viernes 09 de julio 2010.

¿Guatemala? ¿Estado fallido? según Foreign Policy, muy cerca


El Presidente Colom deberá acusar también a Foreign Policy...

Estuardo Zapeta

El Presidente Colom deberá acusar también a Foreign Policy de desestabilizadores, de complotistas, de partido de oposición que le quiere ver el mal, o de medio de comunicación que sólo ve lo negativo de su administración y que invisibiliza los “grandes” logros (¿cuáles?) en materia social.

Si es un poco más atrevido dirá que Foreign Policy le ha “declarado la guerra.” Y es que en la sección de Failed States (Estados Fallidos) de los cuatro países que entran en observación es Guatemala el que encabeza la lista(http://www.foreignpolicy.com/articles/2010/06/21/watch_list) y le siguen Honduras, Nigeria e Irán. Esta lista aparece en la edición de Julio-Agosto 2010.

La Watch List: Four Countries in Big Trouble (Lista de Observación: Cuatro Países en Grandes Problemas) explica los problemas de cada nación citada, y son éstas a las que hay que ponerles el ojo internacional, porque de seguir el rumbo caerían entonces en eso que se ha denominado “Estado fallido”.

El tema central para Guatemala es el poder que el narcotráfico, tanto el de México moviéndose hacia Guatemala como el de Sudamérica subiendo también hacia Guatemala, y sus repercusiones en términos de la violencia que esta actividad genera en esta nación centroamericana.

Yo sólo puedo agradecerle al presidente Colom por llevarnos al borde de “Estado fallido”, y decirle que ojalá sea la UNE la que siga en el poder, ya que para qué jodidos estar al borde cuando podemos disfrutar de una caída adrenalínica, casi orgásmica.

Gracias Álvaro, y no te molestés por hacerle la guerra a Foreign Policy ya que no tenés el chance de siquiera hacerlo cosquillas, y te mirarías tan ridículo –como siempre— peleándote con otro medio de comunicación; en este caso, uno de la talla internacional, el peso global, y un referente mundial como FP.

Pero de eso qué sabés vos, o tus “asesores”, si ustedes están más ocupados echándole penca a Dionisio, o acusando a medios de comunicación de desestabilizadores, al mismo tiempo que llamás a la gente beneficiada por Cojesión Social a estar listos para no sé qué, pero a estar “listos”.

Vos propiciás con tus acciones el acercamiento al “Estado fallido”, y no te hagás el desentendido porque mirá en cuál año aumentó exponencialmente el paso de droga por Guatemala. Qué casualidad.

Dice FP que en Guatemala se nota la utter inability to combat organized crime has only exacerbated the situation. (Eso que te lo traduzcan tus ineptos asesores) Y en la campaña decías que el crimen se combate con “inteligencia,” pues los ciudadanos aquí seguimos esperando tanto el combate como la inteligencia, y de esas no miramos a ninguna.

Los de tu partido, que en realidad está bien “partido”, salieron ayer con un su pinche campo pagado lloriqueando porque no se te reconoce el trabajo de la cojesión social.

Y cómo se te va reconocer si parece que por cada bolsa solidaria, estamos frente a arrobas de droga, si las estadísticas nos indican que el número de asesinados diariamente está peor que en los tiempos de la guerra, y que la corrupción no es sólo del “crimen organizado”, sino también de un gobierno desorganizado. Ah no, pero decir eso es ser desestabilizador, complotista y declararte la guerra.

Ojalá, entonces, digás que Foreign Policy te declaró la guerra, sólo por señalar lo que todos sabemos y sufrimos, nuestro tortuoso camino a un Estado fallido.
Artículo publicado en el diario guatemalateco "Siglo XXI", el día viernes 09 de julio 2010.

jueves, 1 de julio de 2010

Una semana convulsionada

En Guatemala se puede evitar el problema político sin cambiar la Constitución, otorgando Títulos de Usufructo del Subsuelo.

Ramón Parellada

El jueves de la semana pasada fue un día nefasto para las potenciales inversiones en Guatemala. Los titulares de todos los periódicos destacaban el cierre de la mina Marlin, pero además la renuncia del ministro de Energía y Minas, así como el de Finanzas. Estos dos se sumaban a la reciente renuncia del titular del Ministerio de Economía.

La renuncia del ministro de Finanzas nos tomó por sorpresa. Su sustituto es otra persona íntegra que también comparte la ideología del actual Gobierno, pero tendrá que lidiar para evitar el inminente déficit fiscal. Esta renuncia crea mucha incertidumbre en el país.

La dimisión del ahora ex ministro de Energía y Minas coincidió con el anuncio de la mina Marlin. Él fue un defensor sensato de la explotación de los recursos naturales no renovables, y no dejo de pensar en que esto pudo haber influido en su salida.

El cierre de la mina Marlin es político. No hay ni una sola prueba que demuestre que está contaminando el medioambiente. Esto es preocupante, porque el mensaje que se envía a potenciales inversionistas es que no vengan a invertir en Guatemala pues no se van a respetar los compromisos adquiridos y además se cambiarán las reglas del juego.

Considero que el tema de fondo de quienes se oponen a la explotación de recursos naturales no renovables radica en el porcentaje de regalías que reciben el Gobierno y la comunidad. Lo cierto es que si se cambian las reglas del juego se deben hacer para las nuevas inversiones, no para las que ya se han establecido, y hay que velar porque no causen un desincentivo en la actividad que se pretende explotar para beneficio de todos, desde los propietarios de la empresa explotadora, trabajadores, dueños de los terrenos, comunidades e incluso el Ejecutivo.

Considero que los activistas e incluso algunos obispos se han centrado en el aspecto económico de las regalías y que la crítica a la explotación a cielo abierto es sólo una excusa para alcanzar su objetivo. Mejor deberían ser claros y decir que este es el punto que les molesta y no estar usando otros argumentos que no son ciertos (al menos hasta ahora no se han comprobado) para alcanzar lo que desean.

El problema de Guatemala es que el subsuelo es del Estado, y como lo que es del Estado es de todos, al final resulta que lo que es de todos no es de nadie en particular. En los países donde el dueño del subsuelo es el mismo que el de la superficie se evitan todos estos problemas políticos. La gente puede opinar si una empresa está dañando los derechos individuales ajenos pero no puede opinar sobre lo que el propietario quiera hacer en su propiedad.

En Guatemala se puede evitar todo el problema político sin cambiar la Constitución, otorgando Títulos de Usufructo del Subsuelo a los propietarios de la superficie de esos terrenos.
Considero que esto daría mucha mayor seguridad a los inversionistas, generaría mayores ingresos a los propietarios de los terrenos (aumentaría el valor de las propiedades) y comunidades y disminuirían los conflictos causados por la indefinición de la propiedad de un recurso que puede resultar ser muy valioso para el desarrollo de los guatemaltecos.

Mientras tanto, los mensajes de la renuncia de ministros afines al gobierno y del cierre de la mina Marlin son negativos y alejan las inversiones del país. Estas acciones nos seguirán manteniendo pobres, como siempre.
Artículo publicado en el diario guatemalteco "Siglo XXI", el día jueves 01 de julio 2010.

Principios económicos en Latinoamérica

Los indicadores se mueven hacia los de Venezuela.

Federico Bauer Rodríguez

Con el fin de explicar cómo aplican los principios económicos, que conducen al bienestar social, en mis últimas columnas les traje algunos de los índices más relevantes, y la lista de los países campeones.Pero, algunos lectores me han pedido que incluya estadísticas relevantes a Guatemala, por lo que he decidido traerlas y contrastarlas con los dos paradigmas latinoamericanos, Chile representando a las sociedades abiertas, y Venezuela representando al “socialismo del siglo XXI”.

Veamos:En el Human Development Index de la ONU, Chile ocupa el puesto 44, Venezuela el 58 (gracias a su petróleo), Guatemala el 122.En el índice de libertad económica de Heritage Foundation (www.heritage.org/index), Chile ocupa el puesto 10, Guatemala el 83, y Venezuela el 174.

En el Corruption Perception Index de Transparency International (www.transparency.org), Chile tiene una calificación de 6.7 sobre 10 (ausencia de corrupción), Venezuela de 1.9, y Guatemala de 3.4.En el índice de prosperidad de Legatum (www.prosperity.com), Chile ocupa el puesto 36, Venezuela el 74, y Guatemala el puesto 67, a nivel mundial.

Adicionalmente, la semana pasada asistí a la presentación del reporte de Libertad Económica para América Latina 2009-2010 de Frasier Institute, la cual estuvo a cargo del doctor Hugo Maúl, coordinador del mismo, por parte del CIEN. También intervinieron Mario Cuevas, presidente del CIEN, y Otto Guevara (ex candidato presidencial en C.R.), presidente de Red Liberal de América Latina, en la interesante explicación sobre los alcances de dicho índice.

El índice consta de siete áreas: 1) Tamaño del Gobierno; 2) Estructura jurídica y garantía de los derechos de propiedad; 3) Acceso a una moneda sana; 4) Libertad de comercio internacional; 5-a) Regulación del mercado de crédito; 5-b) Regulación del mercado de trabajo; 5-c) Regulación de la actividad empresarial.

Comparemos: Chile saca el mejor lugar, con 8.14 (sobre 10) y el puesto 5 a nivel mundial; Guatemala saca el séptimo puesto en LA, pero el 42 a nivel mundial, con 7.25; Venezuela saca el puesto decimoctavo (último en LA), con 4.33 puntos, y el puesto 138 a nivel global.

Guatemala saca sus mejores notas en los siguientes parámetros: 3) Acceso a una moneda sana y 5-a) Regulación del mercado de crédito; esto gracias a una buena Ley Orgánica del Banguat, a la prohibición constitucional de otorgarle crédito al Gobierno, libertad cambiaria, y una buena Ley de Bancos y Grupos Financieros.

Este reporte confirma lo que he expuesto en otras columnas, en relación a la calidad de la banca privada en Guatemala, ya que obtiene 8.9 mientras que Costa Rica, 8.07, y Chile 9.22.En el parámetro de acceso a moneda sana Guatemala obtiene 9.26, Chile 9.15, y El Salvador, con su dolarización, obtiene 9.35.

En el área de Gobierno también se obtiene buena calificación, 8.16, la cual no refleja la ineficiencia del mismo, esta calificación es del Gobierno anterior; Chile obtiene 7.95 y Venezuela 4.56.En las otras áreas, las calificaciones son muy mediocres, y es importante hacer notar que la mayoría de los índices que les he mencionado tienen casi dos años de rezago.

Actualmente nuestros indicadores están moviéndose hacia los parámetros de Venezuela, y no hacia los de Chile, con lo que cada día nos alejamos más de tener un Estado solvente, con una población que efectivamente combate la pobreza. Si el índice de corrupción era de 3.4 sobre 10, ¿en dónde creen ustedes que estará ahora con este desgobierno?, ¿y la responsabilidad de parte del sector privado que lucra con ese concubinato?

Artículo publicado en el díario guatemalteco "El Peridodico", el día jueves 01 de julio 2010.

Culebrón

Esta semana nos trajo nuevas sorpresas en el caso Rosenberg. Lamentablemente parece ser que a estas alturas la mayoría de personas lo que quiere es llegar ya al último capítulo y olvidarse del culebrón (en el sentido televisivo, pero también en el mitológico), darlo por muerto, enterrarlo y esperar a que nadie se atreva a desafiar a la serpiente peluda que protege el entierro.


JORGE JACOBS A.

¿Y por qué seguir hablando de este caso? Pues porque pudiendo haber sido paradigmático para desentrañar algo de los “grupos paralelos” del crimen organizado, cuyos tentáculos llegan bastante alto, lo que hemos visto es cómo la mayoría, incluida la Cicig, han preferido contentarse con la salida fácil que les permite, a unos voltear la cara y tratar de vivir el resto de su vida como si nada hubiese pasado, y a los otros, seguir su camino en la “escalera corporativa” de los organismos internacionales, sin importarles llevarse entre las piernas la poca institucionalidad que quedaba en Guatemala.

La primera sorpresa fue que los hermanos Valdés Paiz se entregaron el lunes. Yo creo que hicieron lo correcto. No porque la “justicia” guatemalteca sea alguna garantía, ya que ahora la nueva norma inconstitucional es que cualquiera es culpable hasta que logre probar su inocencia, sino porque creo que la opción de pasar toda la vida de “prófugo” puede ser mucho peor que pasarla de reo (con la salvedad que las cárceles de Guatemala son tan inseguras como sus calles).

Con su entrega se cierra un capítulo, pero inicia otro nuevo en esta serie. Aunque algunos crean que con esto se cierra el caso, esto es falso. Aún si se llegara a probar que la hipótesis de la Cicig con relación a la muerte de Rosenberg es verdadera, lo único que se probaría es que Rodrigo, en efecto, se mandó a matar. Pero eso no resuelve para nada el asesinato de los Musa ni las acusaciones que hizo Rodrigo sobre la muerte de ellos, que son el quid del asunto y en lo que no se ha querido profundizar. Al contrario, el hecho de que decidiera inmolarse con tal de que se supieran les da más fuerza.

La otra sorpresa es que en el juicio contra los sicarios que mataron a Rodrigo, el abogado Mario Fuentes Destarac confirmó que este le pidió que le comentara a Rafael Espada acerca de las investigaciones que hacía sobre el asesinato de los Musa, lo que Fuentes afirma que hizo en una reunión que tuvo con el vicepresidente, antes de la muerte de Rodrigo. Espada, para variar, negó haberse reunido con Fuentes (Siglo Veintiuno, 30/6/10, p. 4).

Este punto es muy importante, porque es lo que dijo Marta Yolanda Díaz-Durán en su ya célebre artículo “El beso de Espada” y por el cual el vicepresidente la demandó penalmente. Esa demanda no ha prosperado en varias instancias, pero Espada sigue empecinado en apelarla, por lo cual todavía no se ha resuelto. Lo interesante es que ahora es la palabra de un abogado y periodista, en declaración bajo juramento ante un tribunal, contra la de Espada. ¿A quién le creería usted?

artículo publicado en el diario guatemalteco "Prensa Libre", el día jueves 01 de julio 2010.
Las preguntas importantes siguen en el tintero. Quizá ahora que viene un nuevo comisionado, Francisco DallAnese Ruiz, se atrevan a entrarle a lo verdaderamente importante. En este caso particular, creo que es: ¿Quién mandó a matar a Musa y por qué? (Y que no nos vengan con el cuento de que también Rosenberg lo hizo). Lamentablemente, en este juicio, el que ni se puede defender ni tiene abogado que lo haga es Rodrigo Rosenberg, así que no nos extrañe que lo más fácil sea echarle todos los muertos al muerto y que lo proteja el culebrón.